UNA MIRADA MÁS HUMANA DEL TRANSPORTE MARÍTIMO
En ocasiones al pensar en el transporte marítimo se suele relacionar inmediatamente el buque, el puerto, la carga e incluso el medio ambiente marino. Sin embargo, no siempre sucede lo mismo con un elemento clave, las personas.
La emergencia ocasionada por la pandemia del COVID-19 ha puesto en relieve el importante rol que tienen las personas en el ámbito marítimo. Es así como la Organización Marítima Internacional (OMI), decidió que para este 2021 el lema marítimo mundial será "La Gente de Mar: En el corazón del futuro del transporte marítimo con la intención de visibilizar el trabajo esencial que cumple la gente de mar en la cadena de suministro y por ende en el comercio mundial, y de esta forma promover el elemento humano cualificado y la protección de la vida humana a bordo de los buques.
No obstante, la gente de mar no es la única mirada humana que se le puede dar al transporte marítimo. Como consecuencia de los conflictos armados, la pobreza, el hambre, los desastres naturales, la represión, entre otras causas, un sin numero de personas se ven obligadas a navegar de manera insegura con el sueño de mejorar sus condiciones de vida. En este contexto, la pandemia solo ha profundizado los factores que fuerzan a las personas a desplazarse empeorando la crisis de migrantes por vía marítima.
Al respecto, cabe recordar el valioso trabajo que ha realizado la OMI, desde su rol técnico, para abordar la migración irregular por mar con el fin de evitar al máximo la perdida de vidas. En ese sentido, en el seno de la Organización se ha promovido un marco internacional que alienta a los Estados y a todo el sector del transporte marítimo a prestar asistencia a las personas en peligro en el mar y trasladarlas a un lugar seguro, mientras se trabaja holísticamente con la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Así mismo, la Cámara Naviera Internacional, ICS por sus siglas en Inglés, ha promovido el uso de las Directrices de la industria para Operaciones de Rescate a Gran Escala, teniendo presente que en virtud del Convenio sobre la Seguridad de la Vida en el Mar (SOLAS), los buques tienen la obligación legal y humanitaria de acudir en ayuda de cualquier persona en peligro en el mar. No obstante, en ocasiones aún se enfrenta el reto de asegurar un desembarco rápido de las personas rescatadas.
Por otro lado, a partir de la adopción de la agenda 2030 se acoge una visión transformadora para el desarrollo sostenible centrado en las personas y el planeta. Es así como los ODS 1: Fin de la pobreza; 2: Hambre cero; 3 Salud y bienestar; 4: Educación de calidad y 5: Igualdad de género buscan velar por que todos los seres humanos puedan realizar su potencial con dignidad e igualdad en un medio ambiente saludable.
Así las cosas, no se puede olvidar que el transporte marítimo internacional es indispensable para el crecimiento económico y el desarrollo sostenible, y por lo tanto trabajar en promover un transporte marítimo seguro, eficaz, y sostenible al final termina contribuyendo enormemente al objetivo de un mundo más prospero, equitativo, inclusivo y humanitario para todas las naciones y pueblos.
Por: Natalia Suárez Triviño
DIMAR- COLOMBIA